Tratar con familiares afectados con esquizofrenia o algún otro padecer de carácter mental, no es siempre una tarea llevadera. Gracias a Saltando muros, encontramos unas pautas generales, que si bien están orientadas al personal de instituciones mentales, muchas de ellas podemos aplicarlas en nuestro convivir diario.
Estas son las 20 pautas:
- Respetar al paciente (nuestro “cliente”) y no juzgarlo.
- Ayudar (en la medida de nuestras posibilidades) a mejorar el bienestar, las oportunidades y la felicidad del paciente.
- Mostrar al paciente que nos importa.
- Mantener el sentido del humor.
- Reconsiderar nuestra “distancia profesional” si esta provoca que el paciente se sienta solo.
- No dejar que tu mal humor o problemas personales influyan en tu actitud profesional.
- Si existe riesgo suicida hablar y dar apoyo y protección constante.
- No “escondernos” detrás del periódico, el móvil o el control.
- No permanecer mucho tiempo en los office o el botiquín.
- Consideremos a las familias y amistades como parte del “equipo” (siempre que se pueda) en interés del paciente.
- Ayudemos a nuestros compañeros a dar buenos cuidados en salud mental. Compartamos nuestros conocimientos e información.
- Informar a los pacientes acerca de los efectos secundarios de la medicación, observar y ayudar a encontrar soluciones si es necesario.
- No evitar hablar de los efectos secundarios sexuales de la medicación.
- Ayudar al paciente a obtener un buen cuidado dental y mejorar su salud física y ayudarlos en las visitas al médico y al dentista si es necesario.
- Apoyar al paciente para que realice ejercicio físico regularmente.
- Dar soporte al paciente para que gestione situaciones económicas, domésticas y/o burocráticas.
- Escuchar cuáles son las aspiraciones del paciente (proyecto de vida) y ayudarle a llevarlas a cabo.
- Luchar por los derechos del paciente.
- Luchar contra el estigma de la enfermedad mental en todas las oportunidades.
- Mantener siempre la esperanza.
Fuente: Nursewithglasses
La salud mental. 
excelente articulo me gusto mucho gracias por compartir seguid a si.
Pues mucha gente nos evitan; y incluso no respetan y se burlan, y nos aíslan. Y no tenemos los mismos derechos qué los demás; para qué decir qué tienes esquizofrenia pues es poner una etiqueta en la qué te hacen morir en vida esa es la triste realidad que nos toca vivir.
Esquizofrenia es como decir es una persona agresiva; el otro día había escuchado en un programa qué no todas las esquizofrenias son iguales: muchas veces nos hacemos daños a nosotros mismos, pero a los demás no en mi experiencia.
Una vez más Víctor te quiero dar las gracias por tu blog; no abandones este proyecto tuyo, me ayudas mucho ahora comprendo qué no estoy sola en mi enfermedad… Está enfermedad cauza rechazo por eso cada día nos vamos aislando más hablo en 3ª son muchos los enfermos…,¡y porqué para encontrar una sanación debemos los enfermos de estar juntos; y si hay mejoría ayudar al qué está atravesando aún la etapa más difícil que es la de la recuperación!
Y si es triste ver gente qué en vez de ayudar los utilizan; juegan sicólogicamente con ellos, los dominan cómo títeres y al final acaban perdiendo la razón es muy triste de verdad ojalá Dios y mucha gente te escuchen para que las cosas cambian.
Si mucha gente me está ayudando como mi psiquiatra, mi sicólogo pero la gente de mi entorno si no participa en esa ayuda pues más difícil me lo dejan; yo estoy enferma, pero no soy mi enfermedad y estoy segura de qué con la ayuda de la Divinidad es decir de Jesús, de Buda y de la USM qué me está ayudando voy a salir de la oscuridad al final del túnel hay luz…,¡luz no pienso perder la esperanza; y pienso luchar, luchar hasta el final de mis fuerzas!
Saludos.
Hola. Si que hay mucho desconocimiento, mucha desidia y más se acentúa cuánto más pobre es el país. Hay que confiar en la medicina y sobre todo en la investigación farmacológica. Ya hoy x hoy se pueden ver ciertos resultados…
Gracias por visitar este humilde blog y por sus halagos; las obligaciones diarias hacen que muchas veces no pueda dedicarme más de lo que quisiera; la enfermedad mental sigue padeciendo un tremendo estigma social, ya que incluso, en personas sanas, y más acentuado en el sexo femenino, un simple «bache mental» se suele ya etiquetar como «enferma mental». Como dices, es la realidad que nos toca vivir.
Por otro lado tenemos, como ya he dicho en otros temas, un creciente esfuerzo investigador en farmacología, que cada vez más y en silencio, propicia la salida de nuevos fármacos que aunque no curan totalmente, sí que hacen a enfermos y cuidadores, una vida menos calamitosa.
NUESTRO DIOS PERMITA QUE TODOS PONGAMOS EN PRACTICA ESTOS PRINCIPIOS EN NUESTROS SERES AMADOS EMFERMOS Y LOS AYUDEMOS Y APOYEMOS ,COLOCANDO A DIOS EN PRIMER LUGAR PARA OBTENER LA MEJORIA ,DE SUS SINTOMAS